Ya en muchas partes del mundo las iglesias han abierto sus puertas para reunirse como de costumbre, pero para algunos gobiernos, esto aún sigue siendo un tema por el hecho de que puede multiplicar los casos de contagio, aunque para muchos fieles esto es un levantamiento del «diablo», ya que dicen que no hay restricciones en los supermercados y otros sitios.
En el condado de California, ya las personas pueden asistir al templo, pero no pueden cantar. El departamento de salud pública de California dijo lo siguiente:
«Las prácticas y las presentaciones presentan una mayor probabilidad de transmisión de Covid-19 a través de gotas espiradas contaminadas y se debería recurrir a métodos alternativos como la transmisión por Internet».
Según los centros de control y Prevención de enfermedades, cantar en los cultos es una forma de propagación del virus, ya que mientras cantan salen partículas de saliva.