Las alabanzas o cánticos espirituales son una parte vital de la liturgia de la Iglesia cristiana, y cuando decimos alabanza no estamos haciendo referencia a un piano o a una guitarra, sino a las palabras con las que exaltamos a Dios en el culto cristiano.
Es sumamente importante recordar el hecho de que el el libro de los Salmos son cánticos espirituales que entonaron al Señor personas como David, Asaf, entre otros. Hoy día los usamos para dar sermones, pero también para alabar el nombre del Señor en el culto.