La cantante cristiana Mackenzie Morgan criticó el comportamiento del ministerio musical Hillsong en estos últimos años, y también habló de otros ministerios como Elevation Worship y Bethel Music, diciendo que predican un falso Evangelio.
Entre las declaraciones que hizo Morgan en las redes sociales, dijo que solía escuchar las canciones de cada una de estas agrupaciones musicales cristianas, pero, al analizar las letras de sus canciones se dio cuenta que muchas de ellas contenían ciertas enseñanzas fuera de la verdadera teología bíblica. Hablando del tema de la Trinidad en una de esas canciones dijo:
“… No puedo apoyar a estas iglesias como Elevation y las enseñanzas de Steven Furtick, por su creencia en el modalismo, que es la creencia de que Dios no es un ser y tres personas, sino que Dios cambia a los ‘modos’ de cada persona de la Trinidad. Amigos, eso es una herejía”.
Morgan señaló que estas iglesias también tienen el error de cobrar a otras iglesias para que puedan cantar sus canciones. Además, también criticó sus supuestas falsas enseñanzas, como el evangelio de la prosperidad y otros temas que no pertenecen a la sana doctrina.
Sus declaraciones generaron un amplio debate en las redes sociales, ya que muchas personas dentro del ámbito cristiano han cantado por años las canciones de Hillsong, Bethel o Elevation Worship sin detenerse a examinar a fondo su contenido teológico. Morgan, quien es conocida por su postura firme frente a la Biblia, expresó que su intención no es crear división, sino invitar a los creyentes a reflexionar sobre lo que están cantando y a quiénes están apoyando con su adoración y recursos.
La cantante añadió que la música cristiana debe estar fundamentada en la verdad del Evangelio, no en emociones o modas modernas. Según Morgan, muchas de las letras actuales se enfocan más en la experiencia personal o en la prosperidad material que en exaltar la santidad, la gracia y la soberanía de Dios. “La adoración no se trata de lo que sentimos, sino de quién es Dios”, afirmó en una de sus publicaciones.
El tema no es nuevo dentro del cristianismo contemporáneo. Desde hace varios años, teólogos y pastores han advertido sobre la necesidad de discernimiento al utilizar canciones producidas por iglesias o movimientos cuya teología es cuestionable. Aunque las melodías pueden ser inspiradoras, las letras pueden transmitir mensajes ambiguos o contrarios a la enseñanza bíblica. Para Morgan, esto representa un peligro espiritual, ya que las iglesias pueden terminar enseñando doctrinas erróneas sin darse cuenta, simplemente por reproducir música popular en el ámbito cristiano.
En sus redes sociales, Morgan también animó a los creyentes a estudiar la Palabra de Dios y a no basar su fe en la fama o popularidad de los grupos musicales. Subrayó que los cristianos deben apoyar ministerios que proclamen el Evangelio genuino, sin compromisos con el mundo ni con la búsqueda de reconocimiento. “No se trata de tener miles de seguidores, sino de seguir a Cristo”, escribió en otro mensaje que recibió cientos de reacciones y comentarios de apoyo.
Por otro lado, hubo quienes defendieron a los ministerios mencionados, argumentando que, aunque puedan existir diferencias doctrinales, muchas de sus canciones han llevado a millones de personas a buscar de Dios. Sin embargo, Morgan insistió en que no basta con tener buenas intenciones si el mensaje no está alineado con la Escritura. La pureza doctrinal, afirmó, es fundamental para mantener una adoración verdadera y centrada en Cristo.
Este debate ha servido para recordar la importancia de examinar todo lo que se consume dentro del ámbito cristiano, especialmente en lo que respecta a la música y al contenido que llega a las iglesias. Mackenzie Morgan concluyó su reflexión exhortando a los creyentes a no dejarse llevar por la fama o por lo emocional, sino a buscar siempre lo que glorifica realmente a Dios y edifica al cuerpo de Cristo. Su llamado invita a una adoración más consciente, bíblica y centrada en la verdad del Evangelio.